Para elegir un perfume es suficiente con conocer las notas Sin dudas que es muy útil haber leído sobre el perfume que nos interesa. Pero hay que tener en cuenta que la fórmula de una fragancia puede contener más de 100 ingredientes, por lo que la pirámide olfativa que exhiben las marcas es meramente evocativa. Hasta incluso suelen apelar a imágenes u objetos para denominar a un acorde. Por ejemplo, el narguilé (una mezcla de tabaco, vainilla y miel) en Belle d’Opium, o el caviar (nota hecha con la molecula denominada calone) en Womanity. La única guía fidedigna para elegir un perfume es haberlo probado en la piel.
Cómo nos queda un perfume depende exclusivamente del PH de cada uno El PH es el grado de acidez de una sustancia. Nuestra piel tiene en promedio un 5.5 y no presenta mayores variaciones. Lo que sí influye decididamente en cómo olerá en nosotros un perfume depende de cuán hidratada u oleosa esté nuestra piel y de la composición de nuestro sudor (el cual está determinado por nuestra alimentación y hasta parece que por el genoma, lo cual indicaría que no hay un sudor igual a otro).
Oler granos de café descongestiona la nariz Está internacionalmente difundido, lo sabemos. Pero esto de “neutralizar” olores oliendo otro olor (fuerte y tostado, encima) no tiene base. Al contrario, el olor del café “ensucia” más nuestra capacidad olfativa y distorsiona lo que vamos a oler a continuación. El olfato es un sentido que se satura fácilmente, por lo que es recomendable no probar más de 3 o 4 fragancias por vez -oliendo apenas un par de segundos cada una y descansar unos segundos más antes de oler la siguiente- y evitar a toda costa que toquen la nariz y sus alrededores. En un próximo post nos extenderemos más sobre el momento de comprar un perfume.
Hemos derribado otros mitos de la perfumería aquí y aquí.
Virginia
Nota: la versión original de esta reseña fue publicada en el blog Notas & Acordes el 01/03/12.
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