En el amplio menú de las eaux de toilette de la casa Fragonard, nos detenemos esta vez en una fragancia digna de ser ubicada en la sección de los ‘postres’: Fleur de Vanille.
De una sencillez magistral, entrelaza sus notas para ser degustadas y apreciadas lentamente, sin distinción de género. Al sólo olfato y, se percibe en el aire un acorde perfecto de vainilla, entre polvorosa y ligeramente licorosa. En ese instante, las glándulas salivales comienzan a trabajar y ya no hay vuelta atrás.
El impulso de aplicarlo sobre la piel es irresistible. Luego de sucumbir ante tal poderosa tentación, nos despista un guiño de almendra amarga. Entonces parece que surge la vainilla, pero es una falsa alarma: en realidad era un agrio caramelo de benjuí. Evidentemente, la vainilla está jugando a las escondidas con nosotros.
Otra falsa pista: el cálido y dulce chocolate con leche, que trae de vuelta al caramelo pero esta vez recubierto con ylang-ylang. Por fin, dejamos de hurgar minuciosamente en el ‘plato de postre’ y, antes de rendirnos, ¡voilá!… todo cierra olfativamente. ¡Piedra libre para la vainilla que está detrás de este delicioso manjar!
Virginia
Origen de la muestra: obsequio de un familiar.
Nota: esta reseña fue publicada en el blog Notas & Acordes el 30/11/11.